ANGYE GAONA
ENTRADA FURTIVA DE LA ÚNICA AMADA
Atención, Señores: no hay más casa.
Sólo ésta: la que ven y pisan.
No hay más,
atiendan todos.
Acerquen oído y corazón a la Tierra,
consideren el peso de la edad, Señores
doscientos cincuenta mil años, y observen:
no hay más casa